El procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito, garantizó ayer que procesará judicialmente a los choferes del transporte público que interceptaron en la autopista Las Américas a un autobús lleno de estudiantes que iban para la Feria del Libro y amenazaron con incendiarlo como represalia porque el centro educativo no utilizó sus servicios para transportar a los niños.
Choferes de un sindicato de autobuses de Boca Chica atacaron el autobús que transportaba a unos 50 estudiantes del Colegio Evangélico Episcopal de esa misma comunidad y obligaron a los niños a bajar del vehículo que los transportaba.
Los choferes cruzaron tres minibuses en la intersección de la calle por la que el autobús arrendado por el colegio se incorporaría a la autopista y les recriminaban a los profesores porque utilizaron los servicios de una compañía de autobuses para transportar a los estudiantes.
El suceso ocurrió este lunes en las cercanías del destacamento de la Autoridad Metropolitana del Tránsito (AMET), a la altura del kilómetro 25 de la autopista Las Américas, pero no fue arrestado ninguno de los agresores pertenecientes a los sindicatos de Choferes Profesionales de Boca Chica (Sichoproboch) y de la Asociación de Choferes de Minibuses de Boca Chica (Asochombca).
Tres agentes de la Policía Preventiva que estaban en las cercanías intercedieron cuando los choferes intentaron agredir a los profesores que acompañaban a los niños.
El vocero de la AMET, Diego Pesqueira, dijo que el incidente está bajo investigación para determinar qué acciones tomar.
En tanto que el procurador Domínguez Brito reaccionó alarmado y dijo que “los responsables del incidente serán procesados”.
Lo cierto es que los terroristas del volante están llegando a extremos indignantes en su accionar por imponer las reglas del transporte público, como si fueran dueños de la calle y concesionarios exclusivos del importante servicio.
¿Cómo puede ser posible que se amanece incendiar un autobús lleno de niños, que iban a nutrirse en la Feria del Libro, por el hecho de que la escuela que organizó la gira no contrató el servicio caro y malo de un sindicato perteneciente al crimen organizado del transporte?
Niños de familias humildes que estudian y se preparan para ser buenos hombres en el mañana, y nunca ¡jamás! trogloditas choferes, insensatos y malvados.
Y que esto suceda a la vista de los agentes de AMET, y que estos no hicieran nada por impedir desmanes tan vergonzosos es realmente preocupante.
Eso que dice el procurador de que los responsables del incidente serán procesados hay que sentarse en palco o preferencia a esperarlo, aunque de antemano decimos que ello no es más que una de las tantas amenazas del Ministerio Público en situaciones como estas.
Esta gente no juega. Sólo hay que recordar que le rociaron ácido del diablo y le quemaron la cara a una señora para que había subido a un autobús que no era del sindicato de delincuentes del transporte.
Indigna y da rabia de cómo las autoridades se dejan chantajear de los bandidos del transporte, que tienen como principal cabeza a un señor que se escuda en el Che Guevara para en aras de un denominado Movimiento Rebelde cometer sus tropelías.
Usurpando la imagen de Che Guevara en su propaganda, cuando él mismo en su accionar y en su representación barbada es la viva imagen de Osama Bin Laden
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